Como empezar la memoria de un año tan inusual y con tanta confusión e incertidumbre como el que hemos vivido. Comenzamos entonces señalando las circunstancias de la pandemia como vector condicionador principal, en nuestras vidas en general y en concreto en el proyecto presente. Como Asociación que promueve procesos en positivo y con capacidad de adaptarse a las circunstancias hemos dado la vuelta a lo que nos tocaba vivir y echado la fuerza en lo que “sí” podíamos hacer. Hemos seguido trabajando los objetivos propuestos, adaptándolos en la medida de lo necesario y poniendo especial atención en el cuidado emocional de nuestros usuarios, además de elaborar y mantener todos los protocolos de prevención necesarios para que el espacio de la Asociación fuera un lugar seguro y cálido. Este año además ha sido nuestro primer año de sello de calidad RSA concedido por el Gobierno de Aragón, lo que supone un compromiso importante en la gestión de calidad de la Asociación, el cual se va a ir implementando a través del Plan Estratégico que hemos elaborado, donde se reflejan las metas a alcanzar y las estrategias de mejora continua que vamos a establecer durante los próximos cuatro años.
También este año hemos recibido por fin apoyo municipal al proyecto que realizamos a través de la firma de un convenio con el Ayuntamiento por el cual hemos desarrollado diversas acciones como el estudio de barreras arquitectónicas en las vías públicas de nuestra ciudad y otras que se describen al final de la presente memoria. También ha sido nuestro primer año de participación y promoción de campamentos inclusivos gracias al apoyo regional de la Fundación “La Caixa” con resultados muy positivos a todos los niveles. Y finalmente hemos empezado a incorporar el servicio de “apoyo a las nuevas tecnologías” para compensar la amplia brecha digital que se ha ido acentuando durante estos meses entre muchos de nuestros soci@s y usuari@s.
Podríamos decir que el proyecto en sí se ha dividido en cuatro etapas, las cuales describimos a continuación para mostrar y justificar los ajustes y desviaciones necesarios que han debido darse en las diversas actividades:
– Etapa 1 (1 de enero a 14 de marzo 2020)): hasta la declaración del estado de alarma el proyecto vino desarrollándose tal como estaba previsto, en ambiente de tranquilidad y dando continuidad al trabajo que venimos desarrollando desde hace una década.
– Etapa 2 (14 de marzo a 11 de mayo):las semanas de confinamiento estricto se cerró la Asociación y se suspendieron los servicios. En estos momentos realizamos seguimiento de usuarios que considerábamos más vulnerables, afortunadamente las familias con las que trabajamos han tenido recursos para afrontar la situación, evidenciándose eso sí de manera clara la brecha digital y planteando la necesidad de comenzar a trabajar a ese nivel. En cuanto al desarrollo de los objetivos de trabajo de estos meses planteamos compensarlos ampliando las actividades que terminaban con el curso escolar a los meses de verano.
– Etapa 3 (11 de mayo a 31 de julio): se retoman las actividades con los protocolos de seguridad correspondientes, cuidando especialmente el servicio de fisioterapia. Con niñ@s, adolescentes y jóvenes se promueven actividades al aire libre, dando protagonismo a la actividad de Equinoterapia, así como salidas a diversos espacios lo que nos ha permitido realizar actividades de sensibilización ambiental y conocimiento de nuestro entorno. Finalmente señalar con mayúsculas que se pudiera desarrollar nuestra participación en los Campamentos Ecuestres de Campo Alegre, lo que supuso nuestra primera participación en espacios de ocio promoviendo la autonomía, la inclusión y el disfrute de los chic@s participantes.
– Etapa 4 (1 septiembre 31 de diciembre): se retoma la actividad con las medidas dictadas por los diferentes protocolos pero transmitiendo sensación de normalidad y tranquilidad, se mantienen las atenciones individuales y en pequeño grupo, el resto de actividades grupales se ven afectas, así como las formaciones (sólo se realiza una on-line), talleres en familia y actividades comunitarias que se suspenden hasta que la situación sociosanitaria lo permita.
Agradecer que hemos podido continuar nuestro trabajo sin apenas incidencias y agradecer especialmente a todas las personas y entidades que han apoyado este proyecto, en concreto las entidades que nos han financiado: IRPF, Ayuntamiento de Tarazona, Fundación “La Caixa”, IASS, DPZ y Obra social Ibercaja. También aludir a cada una de las personas que individualmente han contribuido y contribuyen con su granito de arena a que las personas con diversidad funcional sigan contado con este espacio de apoyo e inclusión en sus vidas.
Se despide el 2020 con dureza pero también con avances importantes y muchos momentos de apoyo, solidaridad y cuidado.